Callos a la madrileña con olla GM
Callos a la madrileña con olla GM
Descripción
Los callos a la madrileña son uno de los platos más conocidos y emblemáticos de la gastronomía madrileña. Este guiso de casquería se elabora tradicionalmente con tripa de ternera, chorizo y morcilla, y se suele servir caliente acompañado de pan.
Ingredientes
- 800 gramos de callos de ternera
- 1 chorizo
- 1 morcilla
- 1 cebolla
- 4 dientes de ajo
- 2 cucharadas de pimentón dulce
- 1 hoja de laurel
- 100 ml de vino blanco
- 200 gramos de tomate triturado
- 1 cucharadita de comino en polvo
- Sal y pimienta negra al gusto
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Agua
Preparación
Paso 1: Limpieza de los callos
Lo primero que debemos hacer es limpiar los callos de ternera. Para ello, los lavamos bien con agua fría y los tallamos con un cepillo para eliminar cualquier resto de suciedad. Después, los dejamos en remojo en agua tibia con sal y un chorrito de vinagre durante al menos 2 horas para que suelten cualquier impureza que tengan.
Temperatura: 120 grados
Tiempo: 15 minutos
Paso 2: Preparación de la olla GM
Mientras los callos están en remojo, preparamos la olla GM. En este caso, usaremos la función “Sofreír”. Para ello, añadimos las 2 cucharadas de aceite de oliva y programamos la olla a 140 grados durante 5 minutos. Una vez que la olla esté caliente, añadimos la cebolla picada y los ajos laminados y los sofreímos hasta que estén dorados.
Temperatura: 140 grados
Tiempo: 5 minutos
Paso 3: Sofreír la carne y el embutido
Cuando la cebolla y el ajo estén dorados, añadimos los callos que habíamos puesto a remojo previamente, el chorizo y la morcilla cortados en trozos grandes. Sofreímos todo junto durante 5 minutos más hasta que la carne esté dorada.
Temperatura: 140 grados
Tiempo: 5 minutos
Paso 4: Añadir el pimentón y el comino
Luego, bajamos la temperatura a 120 grados y añadimos las 2 cucharadas de pimentón dulce y la cucharadita de comino en polvo. Revolvemos todo bien para integrar los sabores.
Temperatura: 120 grados
Paso 5: Añadir el vino blanco y el tomate
Cuando el pimentón y el comino estén bien integrados, subimos la temperatura a 140 grados y añadimos el vino blanco y el tomate triturado. Removemos todo bien para que se mezclen bien los sabores.
Temperatura: 140 grados
Paso 6: Cocer los callos
Una vez que el vino blanco y el tomate estén integrados, bajamos la temperatura a 120 grados, añadimos agua hasta cubrir los callos y la hoja de laurel y salpimentamos al gusto. Cerramos la olla y programamos durante 45 minutos.
Temperatura: 120 grados
Tiempo: 45 minutos
Paso 7: Servir
Cuando termine el tiempo de cocción, destapamos la olla y llevamos los callos a la mesa para servirlos calientes y acompañados de pan.